domingo, 20 de marzo de 2011

Educación en inequidad

Como era de esperarse, el economista Eduardo Sarmiento en su columna de hoy (20/03/2011) se refirió a la Ley 100 para Educación:
http://www.elespectador.com/impreso/columna-257909-educacion-lucro-individual
He sugerido denominar así la propuesta de reforma a la Ley 30 de 1992, pues mata las esperanzas de los pobres de adquirir una educación de calidad a nivel superior (no hablemos de la básica, para no alargar el cuento), así como su homóloga en salud disminuye las posibilidades de longevidad. Se me dirá, con respecto a ésta, que al menos ahora casi toda la población puede ser atendida en clínicas u hospitales (¿?), lo que antes no ocurría. También es cierto que hace 50 años no todos en Colombia terminaban su primaria; ahora casi se logra, pero la deserción escolar desde los primeros años en muchas regiones del territorio es superior al aumento en cobertura. Seguirá ocurriendo con la educación superior bajo el nuevo esquema, de aprobarse la propuesta.

Sarmiento había escrito hace justo un año una columna similar
http://www.elespectador.com/opinion/columnistasdelimpreso/eduardo-sarmiento/columna195382-financiacion-de-educacion
la cual he citado a menudo. No es extraño que los grandes economistas, y Sarmiento lo es, se preocupen ahora mucho más por la educación. El premio Nobel en Economía 2000, James J. Heckman, ha dedicado gran parte de su tiempo en la última década a investigar los efectos de la educación en los sectores pobres y marginados. No es sorprendente que los dos economistas coincidan en el diagnóstico, contrario al del Informe Herrnstein-Murray, citado en mi columna anterior. Resumo: los estudios de Heckman y colaboradores demuestran con cifras cómo disminuye, por ejemplo, la criminalidad, y cómo aumentan efectivamente las posibilidades de poblaciones vulnerables y minorías, cuando se invierte en una educación de calidad para ellos. Los autores de The Bell Curve afirmaban lo contrario en 1994. Fue por este camino que conocí los estudios de Howard Gardner sobre mentes y cerebros, conocidos popularmente como Teoría de las inteligencias múltiples. ¡Todos pueden desarrollar su(s) talento(s)! Esa conclusión es importante y constituye una gran noticia para el ingreso a la Sociedad del Conocimiento. Los pocos países que ya lo hicieron se esforzaron por construir antes una sociedad del aprendizaje.

Con la lectura de las 2 columnas citadas de Sarmiento, el lector entenderá mejor las verdaderas consecuencias de la propuesta ley 100 en educación a que nos referimos, así que podría dejar aquí la mía por hoy, pero agregaré un comentario más, fruto de la experiencia de Buinaima. Lo ampliaré en un futuro próximo.
(Véase, no obstante, la página mixta Buinama-SED:
http://www.ethosbuinaima.org/sedbogota/)

A contracorriente de otras vertientes que han trabajado el tema del talento sobresaliente, la organización que represento está convencida de que todos los niños y todas las niñas en condiciones normales vienen a este mundo con 3 características que nosotros resumimos en el acrónimo T•I•C, por nosotros resaltado como los viejos T•I•C (Talento, Ingenio y Creatividad), haciendo de esta manera un parangón con las nuevas t.i.c., o tecnologías de la información y la comunicación. De ahí ha surgido un trabajo muy interesante que se ha desarrollado con financiación principal de la Secretaría de Educación Distrital y de algunas alcaldías locales en Bogotá. La Universidad Nacional, mi Alma Máter, me ha brindado su apoyo, pero hay que hacer un esfuerzo muchísimo mayor. El principio fundamental que invocamos es el del derecho de todos y todas a tener al menos la oportunidad de una educación, no ya de calidad sino de excelencia. Para ello se ha venido elaborando un Programa de Inclusión y Talento que en pocas palabras significa Equidad en una Educación de Excelencia, E•E•E. La calidad en la educación básica es prerrequisito para la excelencia en la superior y esta última es indispensable para el ingreso a una verdadera sociedad de conocimiento... de conocimiento con sabiduría. Mas un esfuerzo aislado es la gota en el desierto. Aquí sí que cabría invocar el apoyo desinteresado del sector productivo, lo que seguramente pasa por la generación de nuevas formas de pensar y de actuar. La propuesta es demasiado compleja para desarrollarla en el breve espacio de un blog.

Dejemos que al menos una mínima parte del sector privado siga interesado en el surgimiento de universidades privadas de buena calidad. No nos digamos mentiras: la educación superior de todos modos ha sido un negocio, pero en las universidades privadas que pueden llamarse de calidad (afortunadamente hay unas cuantas) no lo es tanto, salvo la ganancia representada en otro tipo de beneficios menos tangibles. Las públicas por definición no deben ser rentables en sus matrículas, pero lo que reviertan a la sociedad, proporcional a la calidad de la formación que puedan dar, amerita con creces su financiación estatal y, por qué no, privada, con íntegro respeto por la autonomía universitaria. El incentivo no puede ser el lucro directo y el Estado no puede desentenderse de su responsabilidad. El Gobierno y la clase dirigente deberían entender tan elemental corolario.

(Le invitamos a visualizar la entrada anterior, sobre el mismo asunto, en ENTRADA ANTIGUA o ENTRADA MÁS RECIENTE. Seguiremos profundizando en el tema y promoviendo el debate.)

4 comentarios:

  1. Excelente artículo en especial por las reflexiones que genera para quienes trabajamos en educación, surgen varias preguntas:
    Es claro par todos los sectores implicados y responsables en educación lo que se refiere a Excelncia y equidad en educación?
    Cómo asociar y/o desligar o darle mayor profundidad a la política calidad= cobertura?
    De qué manera medir el impacto de las transformaciones educativas en la transformación y/o progreso de nuestra sociedad y no solamente asociado a los resultados de las pruebas estandarizadas que se realizan a nivel local, nacional e internacional?
    Cómo impulsar la formación docente asociada a resultados e innovaciones de transformación en los entornos escolares relación escuela comunidad?
    Gracias
    Nubia Niño educadora

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  2. COMPAÑEROS... SOPLAN VIENTOS DE INEQUIDAD E INJUSTICIA. DONDE NUEVA MENTE LOS HUMILDES, SON GOLPEADOS POR ESTE REGIMEN DE TERROR QUE SOLO BUSCA SU PARTICULAR DIVIDENDO, DEJANDO DE LADO EL LEGADO DE LA U PUBLICA, QUE LE HA DADO LA OPORTUNIDAD A LA SOCIEDAD DEL LIBRE PENSAMIENTO, DEL DEBATE Y LA PROPOSICION... NO PERMITAMOS QUE LA INFAMIA SE ESCRIBA DE NUEVO EN LA HISTORIA DE NUESTRO PAIS... UTILICEMOS LO QUE ESTE A NUESTRO ALCANCE PARA IMPEDIR QUE SEAMOS GOLPEADOS UNA VEZ MAS... NO A LA PRIVATIZACION, EN NINGUNA DE SUS EXPRESIONES, NI BAJO NINGUN ARGUMENTO.

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  3. La educación pública universitaria va a terminar en el mismo estado de abandono por parte del estado colombiano (regido por non santus dirigentes) como sucedió ya hace varios lustros con la educación pública primaria y secundaria, donde muchos de nosotros tuvimos oportunidad de recibir una educación de calidad, que de otra forma no hubiera sido posible. Por eso estoy de acuerdo en formular la pregunta de Johana Ochoa: y que hacer?

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